Cada uno en nuestra zona habitual estamos experimentando las altas temperaturas que nos acompañan y que además se han hecho notar de modo brusco. Este es el primer punto para sufrir patología por calor.
Desde disminución del rendimiento a dificultad para conciliar el sueño o apatía derivada del calor tenemos múltiples acciones poco beneficiosas para nuestro cuerpo y mente.
Vayan a continuación unas pequeñas pinceladas que nos pueden ayudar:
Evita la actividad deportiva a horas de máximo repunte térmico: Entrenando con altas temperaturas solo consigues una rápida deshidratación y una mala asimilación de la carga de entrenamiento. Si no te queda más remedio…intenta buscar recorridos sombreados y apetecibles mentalmente y mantén un ritmo inferior al previsto ya que tu corazón tendrá que trabajar en exceso para aumentar la pérdida de calor.
Usa toda la protección que puedas: Gorra, Gafa de Sol apropiada, Protector Solar y Ropa con alto índice de transpirabilidad.
Durante la práctica deportiva si vas a hidratarte debes diluir la bebida que habitualmente utilices. Recuerda realizar ingestas regladas cada 20 minutos de entre 200 y 400 ml de Líquido. Esto puede resultar » imposible» si antes no lo realizabas….
Aumenta el contenido de sal en las comidas. Salvo si eres un gran Hipertenso puedes aumentar el contenido de sal en las comidas con lo que conseguirás retener líquidos en mayor cantidad y estarás mejor preparado para la importante sudoración que vas a llevar a cabo. Este hecho te puede hacer más lento en los primeros compases del entrenamiento pero esa sensación desaparece a los pocos minutos.
Si no bebes alcohol habitualmente, ya sabéis la cañita o vinito de los colegas….NO LO HAGAS AHORA. La ingesta en esta época de calor de alcohol puede suponer el fracaso de los mecanismos de adaptación al calor que tiene el organismo.
Ojo con todos los alimentos o bebidas que tienen cierta actividad Diurética…La actividad diurética de fármacos fundamentalmente son junto a la mala hidratación la causa del aumento de mortalidad en personas mayores cuando se sufre una «ola de calor».
En cuanto a la dieta debemos buscar alimentos que sean fácilmente digeribles y predominantemente basar nuestra dieta en ensaladas, Gazpachos, Batidos, etc. Debemos huir de comidas copiosas previas a la actividad física que producen una redistribución vascular hacia el territorio gástrico y mesentérico y nos predisponen a la deshidratación con la actividad física. Del mismo modo debemos evitar las comidas «osmóticas» como pasteles, Tartas, etc.
AUTOR: César Canales Hortelano. FEA Servicio de Urgencias Hospital Virgen de la Luz de Cuenca y Especialista en MFYC. Corredor Equipo Trail Running Cuenca. Campeón de España de Ciclismo en Ruta para Médicos 2009 y 2010, Bronce en 2011