Ayer los suecos Fahlen y Edqvist se llevaron la victoria en la decimonovena edición de la carrera solidaria que se llevó a cabo en los campamentos de refugiados saharahuis de Tindouf, Argelia. Dos españoles alcanzaron el podio de la prueba reina, Leonor Maciá, segunda y Jon Salvador, tercero. Meritxell Bonet ganó el medio maratón.
Un total de 455 corredores que salpicaron el desierto con sus zancadas solidarias e inundaron los campamentos con su ayuda y apoyo a las familias saharauis que permanecen lejos de su país desde hace casi 42 años.
El próximo veinticuatro de febrero varios centenares de corredores de todo el mundo estarán enfrentándose a las inmensas llanuras y las arenosas rampas que separan el campamento de El Aaiun del de Smara en una de las más emocionantes carreras que se disputan en el planeta.
Así es el Sahara Marathon, la única carrera del mundo en la que los verdaderos protagonistas no son los que están en el podio; la única carrera en la que el único tiempo que importa es el que transcurre sin que los saharauis puedan regresar a su país.
El próximo 19 de mayo, el atleta segoviano tratará de poner un ladrillo más en la construcción de su Grand Slam Marathon compitiendo en China. La parte solidaria de la carrera también va a buen ritmo.
El atleta segoviano sigue con su proyecto de completar el Grand Slam Marathon y correrá en el continente helado a partir del próximo jueves 5 de abril tras haber participado en el Sahara Marathon.
