Nadie duda de que dormir es uno de los procesos más importantes para cualquier persona. Durante las horas de sueño, el cerebro realiza una serie de tareas indispensables para nuestra salud. Pero también es importante seguir una serie de pautas para que el sueño se adapte a nuestras necesidades extras que tenemos como corredores de montaña.
Uno de los efectos más importantes que tiene el sueño en nuestro organismo es la recuperación que se lleva a cabo durante las horas en que dormimos. En este tiempo, nuestro organismo libera hormona del crecimiento, lo que tiene una incidencia directa en nuestra capacidad para recuperarnos de la sesión de entrenamiento o de la carrera. Dormir mejor es recuperarse más y mejor.
Además, durante estas horas, el riego sanguíneo que llega a los músculos es mucho mayor, por lo que también ese esencial para deshacernos de los radicales libres y las toxinas liberadas durante la actividad física.
Pero los beneficios para el corredor no acaban aquí, ya que si descansamos lo suficiente, los niveles glucémicos no bajarán tanto como si no descansamos, por lo que tendremos más gasolina para el día siguiente, es decir, retrasaremos el cansancio y la fatiga durante nuestra próxima sesión de entrenamiento.
Derivados de estos beneficios, también podemos encontrar otro de una gran importancia, ya que si nos recuperamos mejor, no nos fatigamos tanto y los músculos están más libres de toxinas, reduciremos considerablemente nuestras posibilidades de sufrir una lesión, por lo que dormir bien significa menos posibilidades de lesionarnos.
¿Cómo dormir bien?
Una vez que ya sabemos los principales beneficios de un buen sueño para los corredores de montaña, el siguiente paso es saber en qué consiste dormir bien. Como en todo, no hay una receta mágica que se pueda aplicar a todos los corredores, pero sí que podemos seguir unas pautas generales que garantizarán un buen descanso.
La regla más conocida es la de las 8 horas de sueño como media para un que el descanso sea reparador, aunque hay personas que necesitan más y las hay que necesitan menos. A pesar de ello, se considera que para un corredor nunca debemos bajar de las 7 horas de sueño para que éste sea efectivo en sus beneficios. En el caso de corredores profesionales, estos suelen incluso superar las 8 horas de sueño diarias.
Pero no sólo es bueno dormir por la noche; como os podéis imaginar, nos referimos a las bondades de la siesta, que también nos ayudará al descanso general, aunque esta, preferentemente, no deberá ser de más de 30 ó 40 minutos, debiendo concentrar casi el 100% de las horas de sueño durante la noche.
Para poder dormir adecuadamente, hay una serie de trucos que seguir para no sufrir insomnio; no se debe comer inmediatamente antes de dormir, debiendo dejar al menos una hora entre la cena y el sueño. También hay que adecuar la ingesta de comida a esta hora, no debiendo comer mucho ni comida que requiera una digestión costosa. Lo ideal es una cena frugal que nos quite el hambre sin llenarnos.
Tampoco se debe entrenar muy tarde; lo ideal es hacerlo horas antes de dormir, pero si no se tiene otra opción, habrá que alejar los máximo posible la sesión de entrenamiento de la hora de acostarse.
Asimismo, se recomienda que durante la hora previa al sueño tengamos los menores estímulos visuales posibles, como por ejemplo puede ser la televisión, el ordenador o el móvil, por lo que se aconseja tener una rutina previa a acostarse, ya que esto ayudará al organismo a relajarse lo suficiente para que no tardemos mucho en dormirnos.
Otras causas de insomnio pueden ser debidas a problemas de salud, por lo que lo ideal es que si sufrimos algún desorden en este sentido, acudamos a nuestro médico de cabecera, que nos podrá recomendar acudir a una unidad de sueño, en la que nos diagnosticarán las causas por las que no llegamos a dormir bien.

Por todo ello, el corredor de montaña debe estar atento a cuánto y cómo duerme, ya que tendrá una incidencia directa no sólo en su vida deportiva, sino en su vida cotidiana. Duerme más y vivirás mejor. Duerme mejor y correrás más.