Durante una carrera de ultra trail, a partir de las dos horas hemos agotado por completo las reservas de glucógeno que teníamos en el cuerpo. Eso significa que tenemos que ir reponiendo para que nuestro cuerpo tenga suficiente energía disponible para seguir prolongando el esfuerzo durante más tiempo.
Pero no sólo debemos alimentar el cuerpo, sino que hay diversas sustancias que nos pueden ayudar al cerebro, que como es conocido, es uno de los “músculos” esenciales en los kilómetros finales de las carreras de larga distancia.
Estas son cuatro sustancias que nos van a ayudar a que nuestro cerebro reciba energía extra y nos ayude en un apartado clave.
Cafeína
La cafeína es utilizada, habitualmente, por el efecto que tiene en nuestro sistema nervioso. Para nuestro cerebro, la ingesta de cafeína puede ser una ayuda significativa en esos momentos en los que la cabeza no funciona tan bien como debería.
La cafeína funciona en nuestro cerebro mediante un proceso que bloquea los receptores de la adenosina; esto significa que nuestro cerebro no es tan consciente del esfuerzo realizado y por tanto la fatiga llega más tarde, también a nivel psicológico.
Hidratos de carbono
Aquí no nos referimos a rellenar los depósitos, sino a un proceso más intrincado. Un estudio demostró que los corredores que metían bebida isotónica en su boca, se enjuagaban y luego escupían la bebida, recibían ciertos beneficios.
¿Por qué? Porque al pasar esos hidratos por la boca, se activan los receptores del cerebro que están conectados con la percepción del esfuerzo, y el resultado es al igual que con la cafeína, una mejora del rendimiento. Eso sí, si no la bebes, no te hidratas ni recargas energía, aunque es útil en esos momentos en los que no entra nada en el estómago.
Mentol
El mentol es una sustancia muy usada en el sector de la alimentación y que es muy popular por dar una sensación de frescor. Pero resulta que esa es una sensación impostada, ya que esta sustancia no refresca la piel de forma literal.
Lo que hace es engañar al cerebro para que sienta ese frescor en cuanto toma contacto con la piel; así, un estudio demostró que un grupo de ciclistas que tomaba pequeñas soluciones mentoladas era capaz de rendir un 9% más que aquellos a los que se les administraba un placebo. Era debido a que la sensación del mentol ayuda a no tener una percepción del esfuerzo tan grande como sin el mentol, engañando al cerebro, pero mejorando tu rendimiento.
Proteínas
Aquí también nos encontramos con bases científicas. Un estudio concluyó que los deportistas que tomaban bebidas con proteína y carbohidratos rendían más que aquellos que bebían sólo hidratos. Tras un tiempo, los investigadores descubrieron que se podía deber a dos factores.
Uno, a que al tomar proteínas, se incrementa el nivel de aminoácidos en la sangre, lo cual ayuda a que el cerebro tenga una menos percepción del esfuerzo ante un mismo ejercicio. La otra, posibilidad es que la proteína es capaz de reponer los daños musculares a medida que se producen y eso también ayuda a tener una menor percepción de cansancio.