Muchos son los que dudan de que una dieta basada únicamente en vegetales pueda ser lo suficientemente completa para un deportista de élite. La opinión de que las proteínas de origen animal no pueden ser sustituidas por las de origen vegetal está muy extendida, sin embargo, hay varios ejemplos de corredores que han llegado al máximo nivel con dietas en las que no hay presencia de productos derivados de los animales.
Si hay un corredor de montaña que enarbole la bandera del vegetarianismo, ese es Scott Jurek. Dueño de un palmarés envidiable, Jurek siempre ha defendido, con palabras y resultados, que se puede conseguir un rendimiento al más alto nivel con una dieta en la que sólo haya productos de origen vegetal.
Siendo de Minnesota, la dieta de Jurek se basaba, según reconoce, “en patatas y carne. Crecí odiando los vegetales. Cuando fui a la universidad comencé a interesarme por otros tipos de dieta y el veganismo casi vino a mí. Como trabajaba en hospitales, me quedó claro que necesitaba un cambio de dieta para evitar ciertos problemas de salud. Fue una decisión a largo plazo hecha para conseguir beneficios a corto plazo”.
Incluso durante un reto como el del Appalachian Trail, que en 2015 le llevó a recorrer más de 3.500 kilómetros en 46 días, Jurek no dejó su dieta basada en productos vegetales; “cuando comía al final del día, todo se basaba en añadir calorías. Le metía aceite de oliva a la pasta, mi mujer hacía tostadas con aceite de coco… Necesitaba la máxima cantidad de calorías”.
Otro defensor acérrimo de las dietas veganas es Sage Canaday; el corredor estadounidense es uno de los más rápidos del panorama mundial, a donde ha llegado, al igual que Jurek, desechando los productos procedentes de animales.
“Este tipo de dieta me ayuda y nunca he tenido ningún problema con la proteína ni lesiones a largo plazo, como fracturas por estrés o problemas serios con los músculos. Llevo corriendo 16 años un máximo de 150 millas por semana, así que quemo muchas calorías a lo largo del año” apunta Sage Canaday.
Además, Sage defiende que cada vez es más fácil seguir este tipo de dietas; “hay muchas alternativas a la leche o el queso. Ahora es fácil hacerse una pizza vegana. Cuando decido qué voy a comer o estoy probando una nueva receta, me pregunto si me va a aportar proteínas, y normalmente las lleva, gracias a la soja, las judías, el arroz… Si no, le añado yo algo que lleve proteínas vegetales”.
Otra que enarbola la bandera del veganismo es la canadiense Ellie Greenwood, una de las más grandes corredoras al otro lado del charco; ganadora de multitud de competiciones de montaña, como la Western States, ha sido nombrada dos veces Ultrarunner del Año en los Estados Unidos. Y es vegana.
“Es difícil saber si mi dieta vegana me ayuda en el rendimiento o recuperación post-carrera. No soy vegana por razones deportivas, sino que he escogido esta opción por motivos medioambientales y éticos. Por eso, incluso si hubiera estudios que dijeran que comer carne y derivados animales mejora el rendimiento, no lo haría”, apunta Greenwood.
Las dudas de las dietas veganas.
Dos son los problemas a los que se enfrentan los corredores veganos: uno es la proteína, que debe ser conseguida siempre con fuentes vegetales, algo que no suele ser tan sencillo de hacer como con las fuentes de origen animal.
Por ello, los corredores que apuesten por una dieta sin productos de origen animal, tiene que tener como prioridad el consumo de productos con un gran aporte de proteínas de origen vegetal. Entre los alimentos vegetales que más proteínas contienen, encontramos la soja, lentejas, garbanzos, judías, berros, cereales integrales, alcachofas, espárragos, coliflor, brócoli, maíz y todo tipo de frutos secos.
Por otro lado, el hierro debe ser una de sus grandes prioridades, ya que es fácil caer en anemias cuando comemos únicamente productos vegetales. Para paliar esto, se pueden consumir productos vegetales ricos en hierro, como las legumbres, aunque la calidad y la cantidad del hierro no son iguales.

En el otro lado de la balanza, están los beneficios asociados a una dieta tan rica en vegetales, como pueden ser un alto consumo de antioxidantes, de fibra vegetal, minerales y vitaminas de todas las familias; de ahí que aquellos que sigan una dieta vegetariana no necesiten suplementos con este tipo de nutrientes. A esto añadiremos la escasa presencia de grasas en este tipo de comidas, lo cual nos ayudará a controlar mucho mejor el peso corporal y los niveles de colesterol.
2 comentarios
Covenhaguen , a Kilian le puedes cargar 100 GPS, ponerle una escayola en la pierna y te sube a la pata coja….
Fantástico deportista.