El pico Bisaurín (2.670 m) es el de mayor altitud del Parque Natural de los Valles Occidentales, el punto más alto que existe entre Somport y los Picos de Europa. Y es la montaña que Virginia Pérez Mesonero eligió ayer para establecer la primera marca femenina de ascenso con 1 hora, 40 minutos y 51 segundos. Se quedó a tan solo 5 minutos del récord absoluto, en manos de Fran Naval (1h35’50») desde hace algunas semanas.
Virginia salió desde la Selva De Oza, concretamente desde el Puente Mirador de Santa Ana, el punto más bajo del valle, a las 7:30 horas. El objetivo era evitar la ola de calor que tanto afectó, por ejemplo, a Andreu Simón en Carros de Foc el día anterior. Le esperaban 10,5 km y 1.700 m positivos en los que progresaría desde tupidos bosques y pastos hasta el mar de rocas que domina toda la zona superior.
A pesar de una pérdida en los primeros tramos que le hizo perder algo de tiempo, la alcarreña fue marcando buenos parciales, llegando al collado de Foratón en apenas 1 hora, y se exprimió al máximo en la agreste zona final.
“He tenido muy buenas sensaciones desde el principio. La verdad es que es un recorrido exigente, ya que al principio se sube mucho desnivel, luego hay tramos de correr mucho y en la parte final hay una pala muy bestia. Me he dado cuenta que puedo correr por zonas donde hace dos años pensaba que era impensable. Me quedo con este crecimiento personal, que es lo que más me gusta de estos retos”, explicó Virginia.
Con los retos de la Bucardada y del Bisaurín en su haber, ahora le queda completar los dos objetivos de mayor envergadura que se ha marcado para este verano sin carreras de trail running: el Garmo Negro, que ha tenido que retrasar por la nieve que aún sigue presente en el pico, y la cima de Monte Perdido.
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