Pau Capell ha añadido un nuevo desafío a su creciente lista. Esta vez ha sido el de la emblemática ruta 0-4-0 en Tenerife, que va desde el nivel del mar hasta los 3.715 m de la cumbre del Teide. Lo ha realizado esta misma mañana empleando 6 horas, 13 minutos y 25 segundos en completar los aproximadamente 55 km y 3.500 m positivos del trazado. Se trata de 5’23” menos que la mejor marca anterior, realizada por José David Lutzardo el pasado mes de julio, tal y como ha homologado el responsable de carreras por montaña de FEDME, Rogelio Macías, que ha actuado como juez-árbitro.
Al diferencia del tinerfeño, que partió de noche en pleno verano, el catalán esperó para partir hasta las 7:00 horas (8:00 horas en la península) desde la Playa del Socorro, en Los Realejos. Ya desde las primeras rampas impuso un ritmo fuerte que le permitió ir sobre el ritmo del récord a medida que progresaba por los senderos que se acercan al Parque Nacional del Teide. Del verde de la frondosa vegetación fue penetrando en los ocres del paisaje árido y rocoso de la alta montaña. Llegó a la cima en 4h06’, abriendo una distancia de 5 minutos sobre el crono de David.
En la cumbre paró 2 minutos para recuperar el aliento, contemplar las impresionantes vistas desde el punto más alto de España y avituallar, antes de volcarse en un descenso que completó en el mismo tiempo que su antecesor, 2h05’. A las 13:13 horas enfiló los últimos metros sobre la arena, se despojó del móvil y cruzó la meta penetrando en el Océano Atlántico.
Tercer y último reto del año
El catalán, ahora afincado en Andorra, ha aprovechado bien esta temporada competitiva truncada por el COVID-19. Después de vencer ex aequo en Transgrancanaria junto a Pablo Villa y acabar segundo en la Fjallmarathon, su primer objetivo a finales de agosto fue el Breaking 20 sobre el recorrido del UTMB. No lo consiguió, se quedó en 21h17’, pero la actividad fue un completo éxito desde el punto de vista del marketing.
Motivado por el gran impacto de su reto alpino, a principios de octubre aumentaba un poco más la distancia para medirse frente al recorrido completo del menorquín Camí de Cavalls, de 185 km, donde 7 años atrás aprendió una gran lección en su primer ultratrail. En este caso, sí que cumplió su objetivo deportivo rompiendo en casi 2 horas el récord de Antoine Guillon y Pere Garau.
Un escenario de récord
La ruta 0-4-0 es el trazado con mayor desnivel para acceder a una cumbre española. Una subida continua que va poco a poco experimentando un cambio cromático y natural debido a la progresión en altitud: de unos senderos y pistas rodeados de densa vegetación al paisaje árido y rocoso de la parte alta del volcán. Empieza a 0 metros sobre el nivel del mar, en la playa del Socorro, para ir penetrando en el Parque Nacional del Teide. Obviamente una de sus características principales es la falta de oxígeno que puede empezar a notar a partir de los 2.500 m, por lo que una pequeña aclimatación puede ser realmente útil.
Si bien en los últimos meses es protagonista de una notable campaña de promocional, desde hace años ha sido escenario ha sido escenario de ataques rápidos y récords no oficiales. La primera marca conocida la estableció, únicamente en sentido ascendente, José R. Ortiz con 4h13’, aunque fueron mucho más sonadas las 3h33’ con las que Agustí Roc le arrebata el récord en 2013. Este tiempo no ha sido todavía superado.
En mayo del año siguiente, en un evento no competitivo, llegaron los primeros registros conocidos en el itinerario de ida y vuelta. Fueron el ya citado de David Lutzardo (6h52’) y el de la murciana Teresa Nimes (8h25’). Ya en diciembre de 2017 fue la sueca Emelie Forsberg la que le pegó un buen mordisco a la marca femenina (7h06’06”).
En los últimos meses la ruta 0-4-0 ha sido protagonista de una pequeña polémica. En noviembre de 2019, el austriaco Thomas Summer estableció un fantástico crono de 6h16’, superando entonces la mejor marca conocida en manos de Fredrik Eliasson (6h38’). Sin embargo, a partir de la información de su track analizada por el propio David Lutzardo, lo hizo incumpliendo la normativa del Parque, acortando hasta en cuatro zonas no permitidas.
