El pasado 20 de agosto, Jonathan Scheiman presentó ante la Sociedad Química Americana un estudio que podría cambiar el mundo de la ultrarresistencia. Este microbiólogo de la Escuela de Medicina de Harvard (Massachussets, EE.UU.) ha estado estudiando las bacterias de los intestinos de corredores de élite, a partir de sus defecaciones, y ha obtenido sorprendentes resultados.
Tras analizar específicamente muestras fecales de ultrarunners, de los que no se han hecho públicos los nombres, vio que cuentan con “un nivel elevado de microorganismos que descomponen los carbohidratos y las fibras”, explica en Quarz, por lo que su capacidad para extraer energía de la comida es mayor que la del resto de personas.
En otro estudio, tomó durante 20 días las heces de 20 corredores que participaron en el maratón de Boston en 2015, durante una semana antes y después de la carrera. Cuando analizaron estas muestras, encontraron una gran colección de bacterias capaces de romper el ácido láctico, el derivado que generan nuestros músculos después de un esfuerzo continuado y que es el causante de las denominadas agujetas.
El autoestudio de Lauren Petersen
No es la primera investigación en este sentido que propone la comunidad científica internacional, cada vez más conocedora de la influencia que tiene, tanto sobre nuestro estado físico como sobre nuestro comportamiento, la composición microbiana de nuestros intestinos.
Dos meses antes era la genomicista Lauren Petersen la que presentaba una investigación basada en su propia experiencia. La estadounidense, que había dañado seriamente su flora intestinal tras un uso continuado de antibióticos, recibió un trasplante fecal –una práctica no regulada en España- de un ciclista profesional y observó como aumentaba la bacteria Prevotella, asociada a la facilitación de la recuperación muscular. “En dos meses era una persona nueva. No me cansaba. Podía entrenar intensamente tres días seguidos, sin problemas”, recoge The Scientifist.
Petersen, mountain biker desde los 14 años, amplió la muestra de su estudio con 35 amigos ciclistas en los que confirmó una mayor cantidad de Prevotella así como unos microbiomas más diversos que en las personas sedentarias.
Antes de que llegue la píldora milagrosa, ambos estudios deberán ser publicados en revistas académicas, donde serán examinados minuciosamente. Su aplicación, por lo tanto, se prevé todavía lejana pero su llegada podría suponer un nuevo capítulo entre la barrera, a veces frágil, entre la suplementación deportiva y el dopaje.

5 comentarios
Alguno termina en el hospital por sobredosis.
El prestigioso laboratorio Salomon-Mojòn informa de que este novedoso suplemento atletico además de en comprimidos Triple-K (KK de Kilian) se comercializa en versión supositorio. Será necesario prescripción defecativa y receta en papel higiénico. Noticias de última hora aseguran que a finales de año también estará disponible en farmacias jarabe Triple-K extraido de las colitis de famosos corredores. Importantes descuentos presentando la tarjeta federativa evacuativa.
En nuestros laboratorios de Salomon, estamos finalizando las pruebas de nuestro producto estrella: Los Comprimidos Triple K ( a base de kk de Killian) Próximamente a la venta en farmacias especializadas.
¿De gargarismos en ayunas con orina ajena no hay estudios? Gracias.
No cabe duda que es la noticia del año. Ya puestos, ¿para qué tomar pastillas? Sería muy solidario que los que suban al pódium donen unos gramos de defecación a los últimos de la clasificación. Para no desperdiciar semejante elixir de salud los jueces árbitros deberían confirmar que quienes reciban la donación no dejan ni rastro en la cuchara. Más información en este enlace: https://www.youtube.com/watch?v=5a_SOwuo fTg