Este fin de semana, uno de los mejores corredores españoles salta a la arena por segunda vez en la presente temporada, y por segunda vez lo hará fuera de nuestras fronteras, algo que cada vez se hace más habitual. Hablamos de Iker Karrera, que el próximo sábado 21 de abril tratará de vencer la primera prueba asiática en la que participa.
Siguiendo la senda marcada por el equipo al que pertenece, el Salomon Santiveri, Karrera seguirá los pasos de Miguel Heras, que la semana pasada venció una prueba de parecidas características, la The North Face 100 Taiwán, mientras que Karrera lo hará en la The North Face 100 Filipinas.
Poco a poco, la marca americana de material deportivo ha ido ampliando el número de citas de su ya famoso circuito de carreras, todas ellas de 100 kilómetros excepto quizá la más prestigiosa de todas y que sirve de cierre de temporada en el mundo de las carreras por montaña, la The North Face 50 de San Francisco, en la que participan los mejores corredores del mundo.
Creada en 2008, la carrera asiática ha ido creciendo año tras año, sobre todo en lo que se refiere a la participación cosechada; sin ir más lejos, Jundel Llagas, responsable de The North Face, ha apuntado que este año estarán cerca de alcanzar el millar de corredores sumando todas las distancias en las que se puede competir, que van desde los 100 kilómetros hasta los 11, pasando por 22 y 50 kilómetros como trazados intermedios.
En el caso de Iker Karrera, se tratará del test definitivo de cara a su gran cita de esta primera parte de la temporada; el vasco se enfrentará al reto de revalidar su victoria (ex aequo, junto a Miguel Heras) en la Transvulcania, que este año registrará la participación de los mejores corredores del planeta, incluyendo a Kilian Jornet, toda vez que la prueba isleña formará parte de las SkyRunner World Series de la ISF.
Serán 100 kilómetros que pongan a punto a Karrera, que ya demostró hace un par de semanas que estaba para ganar carreras; lo hizo en su estreno en la competición en este 2012 en el Trail des Citadelles, en Francia, donde ganó con absoluta solvencia.
