El 2018 fue un año mágico para el trail running español. Por primera vez una prueba nacional sería la encargada de celebrar un Campeonato del Mundo de esta disciplina deportiva, la elegida fue Penyagolosa Trails. La carrera organizada por una agrupación de clubs de la provincia de Castellón y que encabeza el Club Marató i Mitja, preparó un circuito de 85 kilómetros y 5.000 metros de desnivel acumulado con el que España obtuvo grandes resultados. Y es que, al oro por equipos masculino y femenino, se sumó la victoria de Luis Alberto Hernando y las dos platas conseguidas por la corredora local Laia Cañes y el canario Cristofer Clemente.
La emoción que se vivió en la meta de Sant Joan de Penyagolosa aquel día continúa presente hoy. Y ha sido precisamente ese bonito recuerdo lo que ha llevado al equipo organizador de aquel evento a impulsar una campaña que tiene como objetivo “obtener un gran respaldo popular que consiga que el trail sea declarado disciplina olímpica”.
Así, “Make Trail Olympic”, que es el nombre con el que se ha denominado a este proyecto, defiende que un deporte presente en 75 países y en los cinco continentes reúne “todos los requisitos para formar parte de los Juegos Olímpicos”. Además, es una disciplina con historia, que representa los valores centrales del olimpismo: excelencia, amistad y respeto. Éstos crean un cambio social positivo allá donde pasan, basados en la no discriminación, sostenibilidad económica, social y ambiental, humanismo, universalidad, solidaridad o alianza entre deporte, educación y cultura.
Hemos hablado con el director de la prueba castellonense, Tico Cervera, quien nos ha hablado de este proyecto y de cómo les gustaría sacarlo hacia delante.
¿Cómo nace este proyecto?
Make Trail Olympic es una reflexión que venimos haciendo los clubs que organizamos el Mundial de Penyagolosa Trails desde 2018. En aquella ocasión tuvimos la oportunidad de trabajar con 50 federaciones, 350 corredores y corredoras de élite y 800 voluntarios, con un resultado excelente.
De aquello hace ya tres años y el deporte, como la vida, tiende a evolucionar y a afrontar nuevos desafíos. De la mano de gente con experiencia y buena voluntad pueden encauzarse hacia una propuesta olímpica a largo plazo, en la que se mantenga la esencia de aquello que conocemos como trail y tanto el deporte como los agentes que intervienen en la cita deportiva se vean beneficiados.
¿Qué acogida ha tenido la iniciativa entre los aficionados de este deporte?
Desde el primer momento en que lanzamos la propuesta “Make Trail Olympic” los fans la han respaldado tanto en redes como en change.org, porque el trail es una filosofía de vida. Un corredor de montaña cuando se pone el dorsal antes de la salida sabe que tiene que dar lo mejor de sí mismo. Y es que, independientemente de nuestra categoría, todos queremos vernos reflejarnos en nuestros ídolos en unos JJOO.
¿Y por parte de atletas y organizadores? ¿Habéis preparado o tenéis preparada alguna campaña de apoyo con ellos?
El trail running es un deporte muy joven en su profesionalización. En España puedes contar con los dedos de una mano los corredores y corredoras que viven del trail y te sobran dedos, pero en cambio el nivel de los atletas es altísimo. Dedicar tiempo, dinero y salud sin ver un apoyo unánime por parte de instituciones, marcas, federaciones y/u organizaciones provoca incredulidad por parte del corredor élite ante propuestas novedosas, pero con diálogo, esfuerzo y unidad se producen cambios para la mejora de sus condiciones laborales.
Por parte de los organizadores nos estamos poniendo en contacto para explicarles la propuesta y ver si quieren entrar a formar parte de este debate constructivo. El proyecto no ha hecho más que empezar y poco a poco iremos desvelando fases.
¿Has escuchado las declaraciones de Raúl Chapado en cuanto al formato que debería tener el trail en unas olimpiadas? ¿Qué te parecen?
Imagino que te refieres a las que realizó en Canarias apuntando que era imposible ver distancias muy grandes dentro de los JJOO.
Según el vigente reglamento de World Athletics las Carreras de Trail no tienen límites en la distancia, por tanto, entiendo que Raúl Chapado iba en la línea del COI de hacer unos JJOO atractivos para el espectador, por tanto, la distancia se adaptaría más hacia los 42,2km que hacia las ultras.
Para nosotros es importante que se mantenga la segunda parte de lo establecido en esa definición de Trail: “el recorrido debe representar el descubrimiento lógico de una región”, ya que si no estaríamos hablando de un “cross largo”.

El trail running es un deporte muy popular, con mucho corredor amateur y en el que muy pocos pueden llegar a vivir al 100% de él, ¿cómo creéis que puede afectar o beneficiar a este deporte formar parte de unos juegos olímpicos?
El mayor miedo a la hora de que el trail sea olímpico es que se convierta en lo que nunca ha sido, un circuito cerrado al que darle vueltas en el que se pierdan los principios de solidaridad, sostenibilidad ambiental, social y económica que promueve este deporte al pasar por zonas rurales con tendencia a la despoblación.
En cambio, los beneficios son muy amplios si el COI escucha la voluntad de los aficionados. Y es que como disciplina olímpica las federaciones por fin tendrían que trabajar con un objetivo común, con becas e infraestructuras adaptadas a los deportistas, descuidados hasta la fecha, como criterios de selección preestablecidos y claros. Y hoy en día, lo más importante, con una repercusión mediática infinitamente superior a las vistas hasta la fecha.
