El pasado miércoles 21 de diciembre, el Comité Olímpico Español decidió conceder a Gemma Arenas Alcázar, Silvia Lara Diéguez, Virginia Pérez Mesonero, Patricia Pineda Cornejo y Sandra Sevillano Guerra la Medalla del COE a propuesta de la Federación de Montaña (FEDME).
Se trata de la más alta distinción que otorga este organismo nacional y que tiene como objeto «recompensar a las personas y entidades que hayan sobresalido por sus acciones en pro del olimpismo, por sus destacados resultados deportivos o por sus especiales servicios al Movimiento Olímpico y al deporte».
En este caso, que tiene especial importancia al tratarse de disciplinas no olímpicas, se basa en los resultados obtenidos en los pasados Campeonatos del Mundo de SkySnow Running y de Skyrunning:
- Gemma Arenas Alcázar: Subcampeona del mundo Ultra Sky
- Silvia Lara Diéguez: Subcampeona mundo Vertical Skysnow
- Virginia Pérez Mesonero: Campeona mundo de Skysnow, subcampeona del mundo combinada y bronce en carrera vertical
- Patricia Pineda Cornejo: Subcampeona mundo de Skyrunning
- Sandra Sevillano Guerra: Bronce campeonato mundo Ultra Sky
Y es que según figura en el Reglamento de Distinciones del COE, pueden optar a ella los “medallistas olímpicos o medallistas en un Campeonato del Mundo Absoluto o equivalente de máxima categoría, reconocidos por la respectiva Federación Internacional”.
Tal y como nos explican desde la FEDME, «se trata de un premio discrecional, no automático, que el propio COE determina otorgar o no«. Esa podría ser la razón por la que Alejandro Mayor, que también consiguió la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo de Ultra Sky, no la haya recibido todavía. No hemos podido confirmar si su nombre estaba entre los propuestos por la propia federación.
Hasta la fecha, solo tenemos constancia de que la medalla del COE hubiera sido concedida a Luis Alberto Hernando, gracias a su oro en el Campeonato de Europa de Carreras por Montaña Ultra 2017, y Claudia Galicia, Kilian Jornet y Mireia Miró, por sus respectivas medallas en el Mundial de Esquí de montaña del mismo año.
A todos estos títulos, hay que unir la codiciada condición de deportista de alto nivel (DAN) que en la mayoría de los casos ha sido otorgada años atrás por otro logros deportivos, en la que se engloban ya muchos corredores de montaña, tanto de FEDME como RFEA, y que van ligados a ciertos beneficios fiscales y facilidades para poder llevar a cabo su disciplina deportiva.
