David López Castán: “Los ultras son muy divertidos”

David López Castán ha decidido probar suerte en la larga distancia y los 115 kilómetros del Gran Trail Peñalara 2015 eran un reto para él. En la entrevista confiesa que tuvo un momento de bajón en el que incluso pensó en retirarse, pero los ánimos de su gente cuando pasó por La Granja, su ciudad, le hicieron venirse arriba.

¿Cómo ha sido la experiencia de correr el Gran Trail Peñalara?
Lo he pasado muy mal, a mitad de carrera he tenido una crisis fuerte pero ya me había dicho que en los ultras hay momentos para todo. También para rehacerse y volver a tirar para adelante. Eso es lo que me ha pasado. He estado un rato parado, he recuperado, he bebido y el cuerpo ha reaccionado y he podido terminar la carrera bien en un tercer puesto.

¿Cuándo te ha dado el bajón?
Ha sido subiendo el Puerto del Reventón, amaneciendo, cuando iba con Miguel Heras. él ha puesto su ritmo en la subida, he intentado seguirle y quizá por pecar de atrevido he reventado, nunca mejor dicho. He pasado un rato de incertidumbre en el que incluso he pensado en retirarme. Cuando he llegado a La Granja (Segovia) bajaba sin piernas y con el estómago hecho polvo, pero es mi pueblo y había tantísima gente que cualquiera dice que se retira. Al final he salido y me ha venido hasta bien.

«El gusanillo de la competición te hace decir cosas que a lo mejor no dirías fuera»

La larga distancia no es la categoría a la que estás acostumbrado. ¿Ha sido una prueba muy dura?
Ha hecho calor hasta por la noche. Al final sumas horas de calor de noche y de día, por eso se ha hecho tan dura la carrera. Ha habido muchas retiradas de gente importante: Miguel Caballero, Gerard Morales, Felipe Artigues…gente de nombre que se ha tenido que retirar. Yo vivo en La Granja y he tenido la suerte de entrenar por partes. Al final he hecho sesiones más largas de las que estaba haciendo, he metido más horas y más volumen para que el cuerpo asimilase la prueba y ya está.

Has corrido junto a Miguel Heras, el ganador, durante una parte de la carrera…
Miguel es un titán. Venía con la incertidumbre de la lesión y al final ha podido completar la carrera con un nivel altísimo. Yo ya lo decía: si se ponía en la línea de salida podía volver a ganar perfectamente porque se atreve con cualquier rival. Estoy contento por él porque es un corredor que se lo merece. He pasado toda la noche con él hasta que me ha dejado.

¿En un ultra se habla con los otros corredores?
Los ultras son muy divertidos porque con la pareja y el grupo que vayas siempre sale algún chismorreo, comentario, algún chiste… Lo bonito de este deporte es que compartes momentos tanto dentro como fuera de la prueba. Dentro, el gusanillo de la competición te hace decir cosas que a lo mejor no dirías fuera. Eso es muy divertido, con el paso del tiempo te quedas con esos recuerdos. Y luego, cuando te rencuentras con algún corredor, hablas de aquello que pasó…

¿Qué objetivos tienes por delante?
Como objetivo principal, en septiembre me voy con Alfredo Gil a hacer la Transalpine-Run, una carrera muy prestigiosa por etapas en Los Alpes. Antes haré alguna carrera como preparación. Iré a Dolomitas también a correr el Kilómetros Vertical y la Skyrace.