Aroa Sío Recknold se encuentra en California (EE.UU.), donde este sábado 25 de junio a las 05:00 horas (14:00 en España) tomará la salida de la Western States 100. Con 100 millas (160 km) por delante, será la primera vez que supere la barrera de los 100 km en competición.
“Por el momento estoy bastante tranquila y al mismo tiempo super emocionada. No vengo con la mentalidad de competir o de hacer un tiempo en concreto, sino con la de terminarla y disfrutarla. Esto es un gran premio para mí. Sé que los últimos kilómetros se me van a hacer bola, pero tengo tanta ilusión que podría repartirla entre todos los participantes”, nos comenta en una vídeo entrevista.
2022 está siendo el año del sueño americano de Aroa y su familia. El pasado mes de abril, la gallega subió al podio de los 100 km de Canyons Endurance Runs by UTMB (en su segunda carrera de la distancia tras CCC 2021), que discurre por la misma zona de WSER100, y acabó llevándose un Golden Ticket, es decir, un pase directo para la considerada madre de todas las ultras.
“Gracias a Craft [la marca que le patrocina], estoy pudiendo dedicarme de forma profesional a entrenar, haciendo a veces dobles sesiones. Antes era imposible por trabajo. Esto es muy importante y muchos corredores y corredoras de alto nivel que tenemos en España deberían tener lo mismo”
“El ambiente es espectacular aquí, igual que el recorrido y las organizaciones. Se pueden decir mil cosas, pero es mejor venir y verlo. Realmente es como en las películas, con senderos al lado del río donde hay un señor pescando truchas. Es otra cultura. Por ejemplo, se puede acampar al lado del río, algo que en mi región está prohibido. La gente es muy respetuosa con el medioambiente”.
El trazado de la WSER100, siguiendo el estilo americano, es muy corredero, con alto porcentaje de pistas y sendas limpias y un desnivel accesible (5.500 m de desnivel positivo), que se acumula en los dos primeros tercios. “Eso es lo que más miedo me da. Para mí, ir andando en una zona corredera puede ser muy duro psicológicamente. Así que tendré que guardar fuerzas para, si se puede, apretar más en los últimos 60 km, que tienen suman solo 800 m positivos».
«Sé que habrán momentos malos, pero soy una persona que el 98% del tiempo piensa en positivo y ese es el truco, pensar en cosas que te motiven. Yo voy a pensar en lo afortunada que soy y en la fuerza que me dan otras personas que son verdaderas guerreras, y que están luchando por cosas mucho más importantes”.
Una de las características principales de la WSER100, además de las altas temperaturas habituales, es que los corredores tiene la posibilidad de correr con liebres (pacers) a partir del kilómetro 100. “Jacob [Pucey] tirará de mí en los últimos 60 km, cuando ya vas muy cansado. Me hace muchísima ilusión ir acompañada, es algo diferente”.
“Mi vida dio un giro de 180° cuando apagué el último cigarro”
Aroa también ha recordado que ella no siempre ha sido una gran deportista. De hecho, y aunque había practicado atletismo entre los 11 y los 17 años, estuvo 20 año llevando una vida sedentaria y fumando.
“Un día decidí que me quería presentar a una oposición. Salí a correr para ver cómo me encontraba y casi me muero. Allí me di cuenta de todo lo que me estaba quitando el tabaco. Y, si me encontraba así con 36 años, no quería saber como estaría con 40 o 50. Pedí ayuda a mi médico y lo dejé. Empecé a correr para coger buenos hábitos y me vida dio un giro de 180°. Quién me iba a decir a mí que me iba a encontrar con 43 años viviendo profesionalmente del deporte, viajando por nuevos lugares y con una vida mucho más saludable”.
