El desafío del máximo desnivel ascendido en 24 horas tiene un nuevo protagonista. Es el francés Romain Sophys, que el pasado 30 de diciembre de 2019 afirmó haber sumado 15.238 m positivos en un recorrido total de 120 km en la región de Argonne, en el norte del país.
El galo es un ultrero no demasiado conocido, pero ha tachado ya algunas marcas interesantes en su país. En mayo de 2018 realizó la travesía de los Vosgos, de 208 km y 7.500 m+, en 29h33’ (bajando en 1h30’ el tiempo de Stéphane Brogniart), mientras que el pasado verano atravesó los Alpes desde Thonon Les Bains hasta Niza en 160h44’ (11 horas menos que Pascal Blanc).
Como es habitual en este tipo de retos, en esta ocasión no se ha tratado de un récord oficial. Entre otras cuestiones, no hubo árbitros que lo homologasen, ni controles antidopaje, pero el corredor de 39 años puso todo su empeño en hacer lo más exacta posible la medición de su hazaña. De esta manera, contrató los servicios de una empresa especializada que instaló una estación de GPS, un dispositivo con precisión centimétrica que se utiliza profesionalmente en el ámbito de la geometría. 47,26 m fue la diferencia entre el punto más bajo y el punto más alto (aunque él decidió redondear a la baja a 47,2 m) de un bucle de 380 m que completó un total de 323 veces.
El día D+
Empezó a las 10:00 horas y en la actividad participaron hasta 50 personas, entre acompañantes y apoyo. Bajo el sol de invierno, las primeras horas pasan rápido acumulando 5.200 m en 7 horas. Sin embargo, pronto llega la larga noche, con temperaturas por debajo de los 0°C. Así relata su reto en trails-endurance.com:
“La ayuda mutua, el compartir y la solidaridad me ayudan mentalmente a permanecer por debajo de los 5 minutos en cada la vuelta y casi 8.400 metros se suben a mitad del tiempo. Las sensaciones son buenas. La nutrición, que siempre es difícil para mí, va bastante bien a pesar de que todo se está congelando. Me centro en no caer y mantener la concentración. Después de las 18:00 horas, me estoy acercando a los 12.000 m. El cálculo es bastante simple, si me quedo por debajo de 5 minutos por vuelta, lo conseguiré. Como a menudo, cuando vuelve la luz, el cuerpo se despierta. Excepto que el 31 de diciembre, tienes que esperar hasta las 8:00 horas. Qué alivio quitar el frontal. Después de un buen desayuno a base de zumo de naranja, mucha gente se unió a nosotros para el final. […] Entonces aparecen pequeños dolores, pero obviamente menos que Ugo, que se vio obligado a detenerse a las 11h33’. o que simplemente se compadeció de mí. Es en este momento que paso como él los 15.000 m en poco más de las 11h30’. Así que me quedaban 25 minutos para disfrutar de algunas vueltas con mis amigos. Al final, casi 323 vueltas para 15,238m de D. En resumen, una buena última excursión anual donde algo tan estúpido puede volverse tan intenso”.
Al Ugo que se refiere Sophys, no es otro que Ugo Ferrari, el anterior poseedor de esta curiosa marca que ascendió 15.012 m el pasado mes de septiembre. Los anteriores recordmans también son franceses: Christophe Nonorgue y Benoit Girondel.
Antecedentes
No es la primera vez que un atleta propone un desafío similar, aunque el registro de Girondel es el mejor de los conocidos hasta la fecha. De nuestras montañas, el Txindoki (1.346 m) en Guipuzcoa es posiblemente el pico que mayor número de veces ha acogido retos de 24 horas. En 2004, Iker Karrera contabilizó 11 ascensos y 10.395 m de ascenso (945 por vuelta), en 2010 fue Patxi Caminos quien sumó 12 subidas y 11.340 m+ y hace apenas unos meses Aitor Garmendia alcanzó las 13 vueltas y 12.285 m+.
En el contexto internacional, el nombre de Jared Campbell lanzó este desafío en Utah (EE.UU.) 2012 para recaudar fondos contra el cambio climático. Bajo el nombre Running Up For Air, la idea se convirtió en competición a partir de 2016 y es el estadounidense, única persona capaz de terminar en tres ocasiones la emblemática Barkley Marathons, quien tiene desde entonces el mejor registro con 10.144 m+.
Otra curiosa iniciativa es la del Ultra Trail Montmartre, en la que el objetivo es recorrer las 60.000 escaleras del funicular del barrio parisino en 271 ocasiones. En 2018, Alexandre Boucheix fue el más rápido de sus 25 participantes y estableció el record en el recorrido de 80 km y 11.650 m+ con un tiempo de 18 horas y 32 minutos.
Si bien estos son antecedentes relevantes que hemos encontrado en un pasado reciente, la historia de las 24 horas en ascenso se remonta al cambio de siglo, donde esta modalidad se hacía en estaciones de esquí y el descenso en telesilla. Curiosamente, estaba amparada por la Federación de Skyrunning. Así, la primera edición celebrada en Val d’Isere (Italia) en 2001 fue para Adriano Greco, que estableció con 17.575 m+, y para Nathalie Firmin con 14.060 m+ para las chicas. El reto acabaría desapareciendo.
