CimAlp lanza la nueva versión de su modelo 864 Drop Evolution en el que, por primera vez, incluye un diseño pensado especialmente para mujeres. Se trata de una zapatilla de trail muy especial que destaca, sobre todo, por ser el usuario el que elige el nivel de drop con el que quiere correr. Así, los tres pares de plantillas que incluyen serán las encargadas de dotarlas de un drop de 8, 6 o 4 milímetros, y que se convertirán en una herramienta perfecta para que la reducción sea gradual y evitar cualquier tipo de lesión.
Ahora bien, estas CimAlp 864 Drop Evolution sorprenden por mucho más que por sus plantillas intercambiables, también lo hacen por su diseño. Y es que, aunque a simple vista por la estética del upper y la media suela nos puedan hacer pensar que nos encontramos frente a una zapatilla de asfalto, observándola con detalle nos damos cuenta que dispone de todo lo necesario para disfrutar de ellas en la montaña en zonas rápidas de pista y senderos menos técnicos.
Así, debido a las pocas protecciones con las que cuenta, las hemos catalogado como unas zapatillas para terrenos no muy agresivos, ya que tan solo vemos una placa anti piedras en la parte delantera y otra trasera.
En cuanto a la suela, la marca francesa ha apostado por un compuesto VIBRAM®, garantizando tanto el agarre como la durabilidad. Si analizamos el taqueado vemos que no excesivamente agresivo de apenas 3 mm de altura, lo que las convierte en unas zapatillas muy polivalentes que permiten correr con total seguridad sobre terrenos secos y húmedos.
Durante el test a estas CimAlp 864 Drop Evolution me ha sorprendido su gran flexibilidad, algo muy poco usual en unas zapatillas de trail. La marca francesa lo ha conseguido gracias a la tecnología Cromosoma, que permite un comportamiento mucho más dinámico en carrera y que mejora la propiocepción del corredor. Además, en el antepié incorpora una almohadilla R-FOAM que ofrece una mayor amortiguación, que asegura su comodidad y evita rozaduras.
Destacable es también la lengüeta de esta zapatilla que, al estar cosida a la media suela, impide que se mueva mientras corremos y que eso nos genere algún tipo de incomodidad. Otro detalle es el tirador situado en la parte trasera que facilita su colocación.
En definitiva, se trata de una zapatilla de corte clásico, muy cómoda, con la zona del collarín muy acolchada y una estructura muy sencilla apta para medias – largas distancias. Además, se trata de unas zapatillas muy ligeras y transpirables, con un peso de apenas 260 gramos sin incluir las plantillas.