Y la temporada de competiciones de esquí de montaña llegó a su fin. La Patrouille des Glaciers cerró ayer el calendario de La Grande Course con la gran clásica de las Fuerzas Armadas suizas y una jornada espectacular en la que se batieron tanto el récord masculino como el femenino.
Los italianos Robert Antonioli, Matteo Eydallin y Michele Boscacci fueron los más rápidos en completar los 53 kilómetros que separan Zermatt de Verbier, a través de un trazado exigente, técnico y con pasos en altitud. Sus 5 horas, 35 minutos y 27 segundos han significado, tras la homologación de un recorrido que tuvo que ser modificado por el alto riesgo de aludes, el entierro de la mejor marca anterior proveniente de 2012. Tras los militares azzurros, el segundo puesto fue para las estrellas locales Martin Anthamatten, Rémi Bonnet y Werner Marti (5h45m28s), mientras que el podio lo completaron William Bon Mardion Jakob Herrmann y Xavier Gachet (5h31m38s).
Entre las chicas se impusieron Jennifer Fiechter, Axelle Mollaret y Laetitia Roux, que detuvieron el reloj en un tiempo de 7h15m34s, rompiendo también con el récord anterior. En segundo lugar llegaron Severine Pont Combe, Victoria Kreuzer y Katia Tomatis (7h31m11s), y en tercero Johanna Erhart, Veronika Mayerhofer y Malene Blikken Haukoy (8h27m37s). Las españolas Marta Riba y Nahia Quincoces firmaron, junto a la francesa Valentine Favre, la cuarta plaza (8h43m50s).
Michele Boscacci y Axelle Mollaret también ganan La Grande Course
Después del Altitoy Ternua, la Pierra Menta y el Tour del Rutor Extreme, La Grande Course puso el broche de oro un año más con el italiano Michelle Boscacci y la francesa Axelle Mollaret levantadas al cielo el trofeo del circuito en una temporada que se han reivindicado como los más grandes de este deporte, pues ganaron también la Copa del Mundo combinada. Matteo Eydallin y Nadir Maguet, entre los chicos, y Jennifer Fiechter y Katia Tomatis, entre las chicas, les acompañaron en el podio.
