La Gore-Tex Transalpine Run sigue su marcha y ya ha llegado al ecuador de la competición tras haberse disputado ya la cuarta etapa de las ocho que la componen, dejando cada vez más claras las opciones de cada equipo, aunque en esta segunda mitad será cuando realmente se decidan las posiciones finales.
Donde todo parece solucionado es en la categoría femenina, donde el dúo formado por la española Oihana Kortazar y la italiana Silvia Serafini está arrasando de una forma increíble, con cuatro victorias de etapa, en esta con una diferencia sobre las segundas de 32 minutos, con lo que ya han puesto la directa hacia la victoria final.
Además, las que eran sus máximas perseguidoras, la pareja Gitti-Wermescher, no han podido seguir su estela, y al acabar en tercera posición en este cuarto parcial, en la clasificación general provisional ya se encuentran a una diferencia de más de dos horas, mientras que las terceras, Lunger-Gross, ya están a dos horas y media.
En categoría masculina, la lucha se centra en la disputa por la segunda plaza, toda vez que los líderes, el equipo formado por Cameron Clayton y Dimitris Teodorikakos, han vuelto a ganar la etapa (al igual que Serafini y Kortazar llevan pleno de victorias), y siguen aumentando poco a poco su diferencia en la general.
En la lucha por la segunda plaza, la escuadra de Manuel Merillas y Pablo Villa ha asestado un buen golpe al dúo Tófol Castanyer-Philipp Reiter, al que le han sacado más de 11 minutos de ventaja en esta cuarta etapa, por lo que en la general ya disponen de un colchón de más de 10 minutos con respecto a los terceros, mientras que si miran hacia los líderes, están separados por menos de 13 minutos, por lo que esta segunda mitad de carrera será la que decida a los ganadores.
En categoría mixta, nuestros mejores corredores siguen siendo Chemari Bustillo y Nuria Domínguez, que marcaron el cuarto mejor tiempo de la cuarta jornada, lo que les merite seguir en puestos de podio. Son en estos momentos terceros, a 25 minutos del segundo puesto y con un colchón de algo más de 16 minutos sobre los cuartos.
En estos momentos se disputa la quinta etapa de esta edición de la Gore-Tex Transalpine Run, una de las grandes novedades que presentó la organización. Se trata de un kilómetro vertical, de 6, 3 kilómetros de longitud y 940 metros de desnivel positivo acumulado, en el que, al ser por parejas, las distancias pueden ser bastante grandes para los que no son unos especialistas en este tipo de pruebas.
