El pasado sábado 3 de abril se cerraba el último capítulo de la Volcano UltraMarathon Costa Rica 2021, una carrera por etapas en la que Zaid Ait Malek y Stephanie Pierrard consiguieron imponerse con solvencia a sus rivales. Las lluvias torrenciales que obligaron a la Comisión Nacional de Emergencia a decretar la alerta amarilla meteorológica llevaron a la suspensión del quinto día de competición, pero no ha sido este el mayor de los desafíos a los que ha tenido que hacer frente la organización.
Y es que quienes decidieron embarcarse en esta aventura ya sabían que no iba a ser fácil, no solo por la dificultad técnica del terreno al que se enfrentaban, sino también por la meteorología cambiante típica del país. Pero este 2021, tras un año de pandemia, el reto que asumía la organización de la Volcano UltraMarathon Costa Rica era mucho mayor. Su objetivo era demostrar que las carreras sí pueden celebrarse de manera totalmente segura y sin contagios gracias a las medidas aplicadas y que fueron avaladas por la Federación Costarricense de Deportes de Montaña, FECODEM, que a su vez contó con la autorización del Ministerio de Salud del país.
Así, esta segunda edición del evento costarricense consiguió reunir a 150 corredores de 19 nacionalidades diferentes que han participado en alguna de sus tres modalidades: 39km, 100 millas y la prueba reina por etapas de 250 km. Aunque para poder tomar la salida era obligatorio contar con el resultado negativo de una PCR, en el caso de corredores internacionales, y de un test de antígenos, que fue realizado in situ a todos los participantes. De esta manera, una vez realizada esta prueba tanto a atletas como al staff técnico, formado por 47 personas, se convirtieron en un grupo burbuja de 200 personas libre de Covid y al que nadie más que ellos tuvo acceso.
En total diez días de convivencia en los que, a pesar del test negativo, todos ellos estuvieron obligados a continuar cumpliendo con las diferentes medidas sanitarias presentes en el protocolo de seguridad de la prueba también fuera de la competición. Entre ellas destacaba el uso de la mascarilla y gel hidroalcohólico, así como el distanciamiento social.
Además, una vez finalizado el evento, la organización de la Volcano UltraMarathon Costa Rica puso a disposición de todos los participantes internacionales la posibilidad de realizar un test PCR para su posterior viaje hasta su país de origen. Una acción que servía, también, para confirmar la correcta aplicación del protocolo, dando todos ellos resultado negativo.
El director técnico de la carrera, Andrés Lledó, declaraba al finalizar el evento que cree que “vamos a salir fortalecidos por haber conseguido celebrar el evento teniendo en cuenta la situación de crisis sanitaria mundial en la que nos encontramos”. Como él mismo reconocía no ha sido fácil, ya que la puesta en marcha de una carrera de estas características en los tiempos que corren y, además, internacional ha supuesto una experiencia “que nos ha llevado al límite”.
Esctricto protocolo anticovid en la Volcano UltraMarathon Costa Rica 2021Ahora, la aventura Volcano continua. Su próximo destino será Islandia, donde como explica Andrés Lledó “esperamos poder celebrar una carrera totalmente diferente, más corrible”. La prueba, que dará comienzo el próximo 25 de junio y se alargará hasta el 5 de julio, contará con el mismo protocolo covid que su hermana costarricense y que ha demostrado que las competiciones sí son seguras.
