Backyard Ultra es una de las carreras que organiza ‘Lazarus Lake’ en Tennessee (EE.UU.), en las “el patio trasero de su casa”. Otra loca idea del creador de Barkley Marathons con un formato tan interesante como macabro.
Se trata de dar vueltas sobre un bucle de 6,7 km y sin apenas desnivel en un tiempo máximo de una hora. Los corredores que no lo consiguen van siendo eliminados hasta que solo queda uno. Una carrera sin distancia final preestablecida que en su última edición acabó tras 68 horas y más de 450 recorridos.
En los últimos años, a la par que ‘Laz’ o Gary Cantrell saltaba a la fama, este modelo se ha ido replicándose por el mundo, con las mismas normas y bajo su sello.
Si en 2019 son 15 las pruebas asociadas, en 2020 serán 36. Y entre estas neófitas, la Spain Backyard Ultra en Castro Caldelas (Orense) que llegará el próximo 26 de octubre, tan solo una semana después que la versión americana.
“La idea salió tras conocer al otro organizador, Manuel Rolán, que le gusta montar carreras realmente duras en las que sean pocos los que consigan llegar a la meta”, nos explica Luis Rodríguez. “Yo seguía la Barkley Marathons -continúa- y buscando información, ya que me gustaría ir allí algún día, me encontré con este otro formato. Conseguimos el mail de ‘Laz’ y nos pusimos manos a la obra”.
Con mayor diligencia de la prevista, resolvieron casi todos los asuntos organizativos: unas 150 plazas, precio asequible y Golden Ticket para el ganador.
No fue así con el cronometraje, ya que es difícil firmar un contrato sin saber cuánto podía durar, pero se solucionó y las preinscripciones ya están abiertas. “Pedimos información sobre las tres carreras más largas que han hecho desde 2017. De allí seleccionaremos a los mayores ultreros, pero también a gente de la zona que quiera participar, aunque pensemos que no vayan a dar tantas vueltas.
El ganador irá a la versión americana. Tal vez esto no sea un gran aliciente para algunos corredores, pero es uno de los caminos más directos si quieres correr la Barkley Marathons. Como sabéis, ser aceptado allí es una tarea ardua e incierta”, explica el gallego.
Un desafío físico pero, sobre todo, mental
“Como corredor de ultras, lo que más me llamó de esta idea es que tiene que ser un entrenamiento brutal, sobre todo para la cabeza. Correr 100 millas puede ser muy sacrificado físicamente pero vas marcándote objetivos y recorriendo lugares diferentes.
En la Backyard Ultra cuanto más monótono y fácil es el recorrido, más difícil será ganar, porque siempre habrá más personas que hagan lo mismo que tú”, reitera Rodríguez que añade que “en la de EE.UU. nunca ha ganado el mejor corredor sino, como ‘Laz’ dice, ‘el que más voluntad de continuar tuvo”.
Otra curiosidad es que la carrera solo encontrará a su ganador si este da una vuelta más al recorrido dentro del tiempo marcado. Si finalizan dos corredores a la vez o uno de ellos no culmina su bucle final, pierden los dos.
Esto estuvo a punto de ocurrir en la última edición, cuando Courtney Dauwalter y Johan Steene completaron la vuelta 67. Al final él completó una más.

Respecto al trato con ‘Laz’, “es como te lo imaginas. Cachondeo constante y mucha ironía. Entre eso y el inglés, menos mal que nos comunicamos fundamentalmente por email, que podemos leerlo dos o tres veces. Si podemos, lo traeremos para que la gente lo conozca, aunque creo que en ese caso Castro Caldelas se quedará pequeño”.
