Las Skyrunner World Series de 2016 ya son historia. La Limone Xtreme puso punto y final a una de las ediciones más espectaculares de la Copa del Mundo de Skyrunning. Esta edición será recordada como una de las más repartidas de toda la historia de la competición.
Uno de los datos más curiosos es que por primera vez en toda la historia de esta competición, ha habido cinco países con campeones de las World Series. Esto las convierte en las más repartidas que se recuerdan, a lo que ha contribuido que ahora haya cuatro categorías, y no solo tres, como históricamente ha acontecido.
Una vez más, España está en lo más alto como el país con más títulos de la temporada; Cristofer Clemente y Gemma Arenas han logrado las dos Copas del Mundo de UltraSky, si bien las otras tres categorías se han resistido a los españoles, aunque estos han tenido grandes posibilidades de vencerlas hasta el último suspiro.
Junto a España, también Italia y Gran Bretaña han conseguido dos títulos, dejando a potencias como Francia con un título, los mismos que Estados Unidos. Estos han sido los cinco países que este año han conseguido el premio gordo.
Para España, estos dos títulos son una buena cosecha, si bien el aspecto negativo es que por segundo año consecutivo el número de títulos se ha reducido. En 2014 eran cuatro los títulos mundiales que lograba España, mientras que en 2015 fueron tres.
En el otro lado de la balanza están los británicos, que históricamente nunca habían tenido grandes éxitos en el Skyrunning a nivel mundial. Este año sus corredores se llevaron la gran novedad de la temporada la categoría Extreme, que recaía en Jasmin Paris y Jonathan Albon.
Otra de las grandes sorpresas ha sido que apenas un sólo corredor ha sido capaz de retener su título de Campeón Mundial. Ha sido el italiano Tadei Pivk, que por segundo año consecutivo se llevaba la modalidad de media distancia, las Skyrace Series.
En lo que al nivel de participación se refiere, este sigue siendo alto, si bien se nota la ausencia de corredores que solían dar un mayor nivel a esta competición; por diferentes razones, anteriores campeones como Kilian Jornet, Emelie Forsberg, Nuria Picas, Stevie Kremer o Tófol Castanyer no han tenido a esta competición entre sus objetivos.
En el otro lado de la balanza, ha estado la aparición de nuevos corredores que han demostrado un grandísimo nivel, como el italiano Philip Goetsch, que logró la hazaña de vencer la modalidad de Kilómetro Vertical corriendo una carrera menos que el resto de sus rivales, tres por las cuatro de los demás, pero que aun así fueron suficientes para hacerle campeón.
En lo que a la internacionalización se refiere, la ISF ha dado un paso adelante; en su política de crecimiento, este año se han repartido las pruebas por nueve países diferentes. Siete de ellos son europeos, algo normal teniendo en cuenta que el Skyrunning es un deporte típicamente de Los Alpes, pero llegando a países claves, como Noruega o Gran Bretaña, mientras que la para la expansión mundial se ha apostado fuerte por Estados Unidos y por China.
Dentro de unas semanas conoceremos el calendario para 2017; está por ver si se asienta el formato y siguen existiendo las cuatro categorías de esta temporada, y si, ante la ausencia del Campeoanto del Mundo en 2017, se recupera el formato de hace un año, con carreras divididas por continentes.
También quedará por ver si se sigue intentando expandir el Skyrunning por más países y se llega a la barrera de la decena de naciones que acojan alguna prueba. Lo que sí es cierto es que, un año más, las Skyrunner World Series han sido uno de los platos fuertes del trail mundial.
