Ayer debía hacerse celebrado el Trail Mallos de Riglos en la provincia de Huesca, después de verse aplazada en su fecha original del mes de marzo. La crisis del COVID-19 impidió la realización de la carrera, pero no una quedada de corredores de altísimo nivel que se exprimieron en sus dos recorridos de 12 y 35 km. Fue la excusa perfecta para presentar este nuevo proyecto que quiere acercar estas imponentes formaciones, todo un templo de la escalada, al mundo del trail running.
Y es que a partir de ahora los corredores podrán competir sobre los senderos que rodean los emblemáticos mallos durante todo el año, gracias la aplicación Open Trail Races de la empresa The Trail Zone. El sistema se basa en una serie de puntos de control situados en la salida, llegada y distintos puntos del recorrido que reconocen automáticamente (mediante el teléfono móvil, vía bluetooth) el paso de cada corredor, cronometrándolo. De esta manera se genera una clasificación final (general y por categorías) con la que los participantes podrán medirse no contra solo contra sus amigos en directo, sino también contra todos los que quieran completar el circuito.
Entre los que ya lo han probado están algunos de los mejores corredores de Aragón, empezando el seis veces campeón del mundo Luis Alberto Hernando, que completó el trazado de 35 km y 2.200 m+ en 05h06’31”. “Ha sido durísimo por el calor, hubiera sido genial poder haber empezado un poco más temprano”, reconoció el burgalés al finalizar, visiblemente exhausto, tras haber sufrido además un importante extravío.
A pesar de los galones, no fue el más rápido. Una grupeta de alto nivel formada por Virginia Pérez, que una semana atrás batió el récord de La Bucardada, Raúl Criado, que ha pasado el confinamiento en un refugio a más de 2.000 m de altitud, Samuel García y Néstor Arilla, consiguieron parar el crono por debajo de las 4h30’.
Por su parte, Daniel Osanz estableció la mejor marca en el recorrido corto, de 12 km y 800 m positivos, que completó en 01h11’21”. La chica más rápida fue la cadete Candela Pascual que dejó la mejor marca femenina en 1h48’21”.
La de los Mallos de Riglos, promovida por el refugio de montaña de la localidad, es una de las muchas Open Trail Races que se están desarrollando por todo la península ibérica. Desde Andorra hasta Cantabria, con el KV de Fuente Dé, y especialmente en Cataluña, donde presentan más de una quincena de carreras abiertas, el modelo se está extendiendo en nuestras montañas, con especial incidencia en estos tiempos en los que las competiciones presenciales no pueden celebrarse.