Se han celebrado apenas cinco ediciones, pero han bastado para convertir a la Transvulcania en uno de los ultra trail más importantes del planeta, con sus dos últimas ediciones contando con un plantel que nada tiene que envidiar a otras prestigiosas pruebas de larga distancia. Por La Palma han pasado Miguel Heras, Kilian Jornet, Iker Karrera, Dakota Jones, Anna Frost, Emelie Forsberg, Nuria Picas, Tim Olson, Sebastien Chaigneau… y podríamos seguir la lista durante algunas líneas más.
Pero lo que ahora se debate en La Palma no es la calidad ni la importancia de la carrera, sino el coste público que supone tener a tanto gallo en la línea de salida en el Faro de Fuencaliente. Según las últimas estimaciones realizadas por el Cabildo de La Palma, el coste de la edición de este año está ya en 900.000 euros, aunque “nos siguen entrando facturas de servicios realizados y que hay que pagar», según la responsable insular de Economía, Elena álvarez.
Por ello, de cara a la próxima edición, desde el Cabildo esperan controlar más los gastos que supone la carrera para el contribuyente. Las cuentas que se manejan a día de hoy hablan de que la próxima edición costará a las arcas insulares 560.000 euros, mientras que el resto del gasto se compensará con las inscripciones y los diferentes patrocinios. Para la pasada edición, sólo las inscripciones supusieron unos ingresos de 130.000 euros, mientras que por patrocinios se calcula que hay que sumar a esa cantidad otros 13.000 euros.
Este presupuesto pone de manifiesto el alto coste que supone organizar una prueba de calado mundial, si bien, y tal y como publicamos en su día, la Transvulcania genera mucho más. Según un estudio de la empresa especializada Corporación 5, la prueba genera 18 euros para la isla por cada euro invertido por el Cabildo.
Desde la Consejería de Hacienda se asegura que sólo el impacto mediático que se produce durante la semana de la carrera tendría un coste de más de un millón y medio de euros; las conclusiones del estudio afirman que la suma de los impactos económicos directos, indirectos e inducidos por este evento en La Palma genera un beneficio bruto de 2.626.831,46 euros.
Cambio en el sistema de voluntariado
Para la sexta edición, el nuevo gobierno de La Palma cambiará el sistema de elección de los voluntarios, una de las partes esenciales de toda carrera, y más de esta, que recibe a más de 2.400 corredores, cifra que esperan aumentar, ya que el próximo año se unirá a la familia la distancia del maratón y un kilómetro vertical que, al igual que la ultra, formará parte de la Copa del Mundo de la ISF.