Un final surrealista para la primera prueba del Ultra-Trail World Tour en Hong Kong. Tras 9 horas y 28 minutos de esfuerzo, Liang Jing cruzó en primer lugar la meta luciendo una sonrisa reservada. Ya intuía que los árbitros de la prueba estaban valorando la descalificación que finalmente se hizo efectiva. “Su victoria ha sido anulada por recibir apoyo fuera de los puestos de control, lo que no está permitido por las reglas de la carrera”, explica el organizador de la HK100, Steve Brammar, en el comunicado oficial.
El corredor chino argumentó que pidió agua a un excursionista, pensando que tenía el permiso para cambiar su botella vacía por otra llena. Además, fue acusado de lanzar el recipiente vacío al suelo. Jing finalmente expresó su disgusto por el malentendido, se disculpó por su comportamiento y declaró que nunca se repetiría.
Unos segundos por detrás, cruzaba el arco de llegada al esprint su compatriota Qin Min. Su tiempo, 9 horas, 28 minutos y 36 segundos es el nuevo récord de la carrera asiática de 100 kilómetros. Segundo fue el estadounidense Alex Nichols (9h44m), que puso de relevancia la gran dificultad de la carrera, mientras que el tercer lugar del podio fue para Yunhui Yu (10h04m). El nepalí Suman Kulung, vencedor del Everest Trail Race por delante de Luis Alberto Hernando, fue séptimo.
Entre las mujeres, Miao Yao se impuso con un sorprendente crono de 10 horas y 40 minutos. La atleta china, que rara vez compite fuera de su país, dio la gran campanada pegándole un mordisco de 38 minutos al récord que el año anterior había conseguido Núria Picas. Tras ella, la nepalí Mira Rai (11h30m) firmó la segunda plaza, mientras que Xiang Fuzhao (11h36:m) fue tercera. Distinta suerte corrió la vigente campeona del UTWT, Andrea Huser, se tuvo que retirar por primera vez en su carrera.